Tomado de Universo Béisbol
Por Reynaldo Cruz
El comienzo de la 55 Serie Nacional de Béisbol está al doblar de la esquina, con cambios sustanciales en su rostro —lo cual ha sido precisamente la tónica en los últimos años— y con un futuro más incierto aún. Podría incluso decirse que la incertidumbre de hoy supera precisamente al escepticismo que inundó los corazones de la fanaticada de aquellos Almendares, Marianao, Habana y Cienfuegos, cuando los cuatro grandes clubes profesionales de la pelota invernal cubana desaparecieron para dar paso a la Serie Nacional.
Las circunstancias de hoy son bien diferentes. Para nadie es un secreto que la cantidad de peloteros que abandona el país es tan alta, que los rosters sufren cambios radicales de la noche a la mañana. Lo más notable incluso puede llegar a ser precisamente que el éxodo no es solamente hacia el exterior del país, sino que se vive también una época en la que los peloteros buscan jugar donde se sienta mejor (y donde no consideren que están acabados).
Es por eso tal vez que Víctor Mesa parece más un Profesor Frankenstein armando un monstruo con lo que puede escoger (porque no se trata de un trabuco, que quede claro) de lo que otros equipos desechan o de aquellos peloteros que ya no se sienten cómodos en sus respectivas provincias. Pero Matanzas no es el único (sí, porque la gente va a magnificar precisamente lo que haga VM32), pues varios equipos han dado oportunidad a veteranos o jugadores sin el suficiente vuelo en Series Nacionales que no tendrían las mismas posibilidades en sus respectivas provincias de origen.
En el escenario cambiante del béisbol cubano, puede verse también a varios peloteros cubanos que han en jugado en Series Nacionales exclusivamente en el Siglo XXI brillando en las Grandes Ligas.
Este punto aclaratorio es importante en extremo. De los tantos de jugadores cubanos que hoy juegan en las Mayores, el primero que abandonó el país fue Kendrys Morales, quien probó la estructura de 16 conjuntos, 10 partidos con los equipos de cada grupo y cinco con el resto, para 90 choques… pero en apenas la segunda Serie Nacional de Kendrys experimentó su primer cambio, cuando se obligó jugar seis encuentros con cada contendiente para hacer las cosas “más parejas”.
Si hacemos un análisis bien minucioso, podríamos decir que entre todos los peloteros cubanos que ven acción hoy en la Gran Carpa se han visto todas las estructuras, desde la que se tenía a finales del siglo pasado, hasta la que murió el pasado año.
¿A dónde quiero llegar?
Es muy simple. A pesar de los cambios de estructuras, algunas menos espectaculares, otras menos competitivas, otras menos exigentes, el pelotero cubano sigue mostrando una calidad enorme justo al momento de llegar a la Gran Carpa… no importa si fueron buenos, regulares o malos en la Serie Nacional, la gran mayoría de ellos lo hace bien, o lo hace por encima de la media.
Contrario a la época de los años noventa, cuando el mayor talento cubano que llegaba a las mayores era precisamente su pitcheo (René Arocha, Rolando Arrojo, Osvaldo Fernández, Orlando “el Duque” Hernández, Liván Hernández), hoy son los bateadores los que llevan la voz cantante. Lo mejor que llegó de Cuba en aquel tiempo al Big Show en materia de jugador de posición fue Rey Ordóñez, pero no fue su bate precisamente lo que lo hizo mantenerse a flote en el béisbol más exigente del mundo… algo que precisamente lo contrario hoy con los José Dariel Abreu, los Yoenis Céspedes, los Yasiel Puig, los Kendrys Morales.
La afirmación puede tener no pocos detractores, pero hay que hacerla: en la MLB hoy se promedia colectivamente para .254, o sea, que esa es oficialmente la media de las Grandes Ligas. Bastante baja, podemos admitir, sobre todo en comparación con las medias que se ven en las Series Nacionales cubanas, que llegan a veces a cifras espantosamente altas.
Dieciocho cubanos han visto acción en la Gran Carpa este año, y de ellos, solamente cinco están por debajo de esa media: Adonis García (.246, pero 6 jonrones y 10 empujadas en 31 partidos), Alexander Guerrero (.233, pero 11 jonrones y 32 impulsadas en partes de 86 juegos, viendo acción mayormente como suplente), Leonys Martín (.220, en su peor campaña, aunque sí con cinco cuadrangulares), Yasiel Puig (sorpresa esta, apenas un punto por debajo con .253, aunque sí ha disparado 11 vuelacercas y 38 empujadas), y Alexei Ramírez (torpedero, con .238, más ocho batazos de vuelta completa y 48 compañeros fletados hacia el plato). ¿Se han puesto a pensar cuántos bateadores en la MLB están este año por debajo de ese promedio?
El resto, o sea los otros 13, independientemente de su tiempo de juego, tiene averages por encima de la media, y casos como el de Abreu (.294, 24 HR, 77 CI), Yoenis Céspedes (.296, 25 HR, 82 CI), Kendrys Morales (.285, 14 HR, 87 CI), o Yunel Escobar y José Iglesias (ambos por encima de .300), son muestras de la altísima calidad que tienen los bateadores cubanos, sobre todo cuando apenas 70 bateadores superan los .270 de promedio, y 24 de ellos los .300 en todo el Big Show.
Entonces, es válida la teoría de que la Serie Nacional no es una escuela tan mala —aunque el caso de Yasiel Puig es la muestra más clara de que los peloteros cubanos carecen de disciplina táctica— o al menos se puede decir que el talento que ha salido de ella no es de lo peor. Miremos solamente a aquellos que están por debajo de la media y preguntémonos si pueden rebasarla… pienso que sí, todos.
Cuando se dé la voz de play ball el próximo domingo en el Estadio José Ramón Cepero de Ciego de Ávila, comenzará otra temporada cubana, cargada de emociones, críticas, hazañas, indisciplinas, polémica, intriga, talento, mediocridad… una mezcla de interrogantes y certezas, pero además, otra carrera más hacia la supervivencia, y otra carrera más por parte de algunos cazadores de talentos en busca del próximo Céspedes, Kendrys, Abreu o Puig que abandone el país de una manera u otra.
En cierto modo, ha sido esta la mayor causa por la cual algunos peloteros se mueven de una provincia a otra, lo que ha hecho también que en los últimos tiempos los rosters de los equipos a las Series Nacionales sean cada vez más cambiantes, al tiempo que ha sido la oportunidad para que varios veteranos, que incluso llevaban uno o dos años sin participación en la Serie regresen con sus equipos o con otros. Será esta serie, como indica el pasado reciente, un evento con características típicas de un escenario ultra complejo: éxodo masivo, dos pausas considerablemente largas en medio de la competencia y una reunión con la MLB supuestamente durante una de ellas.
El béisbol cubano cambia, a un paso diferente al del resto de la nación, pero cambia. Desde las Mayores —u otras tierras— los que se han ido siguen con detenimiento los acontecimientos: algunos podrían volver a integrar las filas de la escuadra nacional, todos aspiran a volver un día a su tierra y ser bienvenidos en ella. Desde adentro, muchos aspiran a tener la oportunidad de demostrar que los que brillan hoy en las Grandes Ligas no son los únicos peloteros cubanos de calidad, y la SNB o la escuadra nacional a un evento internacional sirve en cierto modo de escuela o de vitrina para mostrarse.
Es esa la realidad actual del béisbol cubano, y es tal vez esa la razón de mayor peso por la que tantos cambios se harán para esta Serie y tantos cambios (aún desconocidos) se anunciaron para el futuro.
LABOR DE LOS CUBANOS EN LA MLB (Estadísticas de Cuban-Play)
Bateadores
Jose Dariel Abreu | |||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP |
120 | 472 | 74 | 139 | 24 | 77 | .294 | .352 |
Yonder Alonso | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
97 | 334 | 45 | 91 | 5 | 28 | .272 | .353 |
Rusney Castillo | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
49 | 158 | 25 | 48 | 5 | 25 | .304 | .337 |
Yoenis Cespedes | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
125 | 506 | 80 | 150 | 25 | 82 | .296 | .328 |
Yunel Escobar | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
111 | 426 | 59 | 131 | 9 | 41 | .308 | .365 |
Adonis Garcia | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
31 | 114 | 13 | 28 | 6 | 10 | .246 | .256 |
Yasmani Grandal | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
94 | 291 | 41 | 80 | 15 | 44 | .275 | .383 |
Alexander Guerrero | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
86 | 189 | 22 | 44 | 11 | 32 | .233 | .258 |
Adeiny Hechavarria | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
123 | 447 | 53 | 126 | 5 | 48 | .282 | .317 |
Jose Iglesias | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
113 | 394 | 41 | 120 | 2 | 22 | .305 | .351 |
Leonys Martin | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
94 | 287 | 26 | 63 | 5 | 25 | .220 | .265 |
Kendry Morales | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
125 | 456 | 56 | 130 | 14 | 87 | .285 | .352 |
Brayan Peña | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
86 | 287 | 15 | 79 | 0 | 15 | .275 | .341 |
Yasiel Puig | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
76 | 273 | 30 | 69 | 11 | 38 | .253 | .321 |
Alexei Ramírez | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
122 | 458 | 38 | 109 | 8 | 48 | .238 | .267 |
Jorge Soler | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
90 | 343 | 35 | 91 | 7 | 42 | .265 | .325 |
Yasmany Tomas | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
98 | 353 | 37 | 103 | 8 | 43 | .292 | .323 |
Henry Urrutia | ||||||||
GP | AB | R | H | HR | RBI | AVG | OBP | |
10 | 34 | 3 | 9 | 1 | 6 | .265 | .306 |
Lanzadores
Aroldis Chapman | ||||||||
GP | INN | W | L | SV | BB | SO | ERA | |
51 | 50.2 | 3 | 4 | 24 | 27 | 90 | 1.78 |
Odrisamer Despaigne | ||||||||
GP | INN | W | L | SV | BB | SO | ERA | |
26 | 115.1 | 5 | 8 | 0 | 27 | 61 | 4.99 |
Roenis Elias | ||||||||
GP | INN | W | L | SV | BB | SO | ERA | |
14 | 79.0 | 4 | 6 | 0 | 26 | 64 | 4.22 |
Jose Fernandez | ||||||||
GP | INN | W | L | SV | BB | SO | ERA | |
7 | 43.0 | 4 | 0 | 0 | 10 | 53 | 2.30 |
Dalier Hinojosa | ||||||||
GP | INN | W | L | SV | BB | SO | ERA | |
4 | 6.2 | 0 | 0 | 0 | 3 | 7 | 0.00 |
Raisel Iglesias | ||||||||
GP | INN | W | L | SV | BB | SO | ERA | |
14 | 73.1 | 3 | 5 | 0 | 21 | 77 | 3.93 |